La reforma, palabra clave para el futuro del régimen chino
Madrid. Transcurridos ya unos días de la celebración del Tercer Pleno del Comité Central del XVIII Congreso del PCCh, puede observarse de forma serena y sin el apresuramiento de las noticias de última hora, la trascendencia de dicha reunión para poder deducir cuales van a ser las líneas maestras del régimen chino ante el próximo futuro.
Las plenarias del Comité Central constituyen reuniones de muy alta relevancia, ya que precisamente en la década de 1990 el desaparecido dirigente y fundador de la China moderna, Deng Xiaoping, impulsó por primera vez el proceso de reformas y apertura de la nación. El máximo dirigente actual, Xi Jinping, ya había manifestado con anterioridad la importancia de la “reforma”, concepto fundamental para decidir el camino de China, porque de él dependerá el éxito o el fracaso del régimen.
El Comité Central del PCCh, formado por 120 miembros titulares y 170 suplentes, reunido a puerta cerrada, ha aprobado el informe presentado por el líder chino, Xi Jinping, cuyo núcleo fundamental y que marcará la política del gigante asiático, es el tema de la reforma y en el reforzamiento y mejora del liderazgo de la nación china por parte del Partido Comunista.
Xi ha exhortado a los dirigentes nacionales a profundizar en dichas reformas, a realizar descubrimientos, innovaciones y progresos, y esforzarse en el desarrollo de una peculiaridad del sistema repetida incesantemente: la consecución del socialismo con características chinas, concepto que ya fue establecido por Deng hace más de 30 años. Xi ha manifestado la necesidad de que China necesita más valentía y sabiduría para profundizar en la reforma- como puede observarse “reforma” es la palabra clave- en los sectores más importantes.
En líneas generales figuran de forma destacada la reforma de las empresas nacionales más importantes, el problema de endeudamiento de los gobiernos locales, la mejora de la distribución de la riqueza entre las zonas costeras y algunas del interior, la eficacia de la administración, la disminución de la burocracia, y el problema de la corrupción.
Adquiere especial importancia por su trascendencia hacia la consecución de uno de los puntos básicos del sistema, y que sus portavoces más autorizados, anteriormente Hu Jintao, y ahora Xi Jinping, así como cualquiera de los miembros del Comité Permanente del Politburó, manifiestan en cualquier ocasión, y es el del camino continuado “hacia una sociedad modestamente acomodada”. Este lema, así como el citado del socialismo con características chinas, constituyen piezas básicas del sistema.
Un aspecto particularmente concreto es el dentro de la “economía socialista de mercado”, la apuesta del Comité Central, tras el plenario, por la promoción de diversas formas de propiedad, alentando el desarrollo del sector privado, lo que estimulará la vitalidad y creatividad de toda la economía, mejorando el sistema de protección del derecho de la propiedad, y que las empresas propiedad del Estado desarrollarán modernas prácticas corporativas que apoyen el desarrollo de la economía no pública.
El plenario del Comité Central reconoció el decisivo papel del mercado en el reparto de recursos y reiteró que el mercado ha sido, frecuentemente, instrumento básico desde que en 1992 , China decidió edificar la “economía socialista de mercado” conforme a los postulados de Deng Xiaoping.
Ángel Maestro, periodista, politólogo y analista internacional
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[…] y a la vez calibrar sus movimientos de cara a una serie de reformas que se han diseñado en el reciente plenario del XVIII del Comité del Partido Comunista de China (PCCh), consideradas claves para la modernización del […]
[…] del equipo gobernante, y de su verdadero y máximo órgano de poder, el Comité Permanente del Politburó- sin la aprobación del partido no podrían producirse tales medidas- significativos representantes […]