La inversión privada china rivaliza en el fútbol español de Murcia

Estadio Nueva Condomina
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Madrid. El capital chino saldó con empate a uno la disputa sobre el verde de la neutral ciudad de Murcia (sureste) pero no en los despachos, donde los equipos murcianos de Jumilla y Lorca afrontan una rivalidad más que regional desde la llegada de los empresarios chinos Li Xiang, Tang Hui y Xu Genbao esta temporada para potenciar el fútbol de ambas ciudades.

El denominado “derbi de Shanghái” por la procedencia de sus propietarios, reunió a más de 10.000 personas en el estadio Nueva Condomina de la capital regional, con capacidad para 31.000 espectadores, en un partido oficial de la tercera categoría del fútbol español, la Segunda División B.

Favoreció la entrada el acceso gratuito, el sorteo de un coche y de dispositivos electrónicos de última tecnología, además del chocolate con churros repartido para saciar el apetito.

Simpatizantes, aficionados al deporte y público ajeno asistieron a un espectáculo que plataformas audiovisuales de pago emitieron para 30.000 televidentes en China, lejos de la audiencia estimada de 300 millones, dentro de un recinto alquilado para la ocasión por la dirección del equipo local, el Fútbol Club Jumilla.

El binomio de locures deportivos formado por Li Xiang y Tang Hui, como administradores, inició la promoción del partido un mes antes, a principios de octubre, con su aparición en entrevistas de medios de comunicación nacionales, a pesar de la entrada libre al estadio.

Al contrario que Xu Genbao, exseleccionador de China y nuevo propietario del Lorca Fútbol Club SAD, anteriormente conocido como La Hoya Lorca, que ordenó a los responsables de redes sociales del equipo mantenerse al margen de la campaña publicitaria del conjunto rival.

Tres empresarios del »gigante asiático» que han incrementado el capital chino invertido en el fútbol español, luego de la participación accionarial de Wang Jianlin, del Grupo Wanda, en el Club Atlético de Madrid, Chen Yansheng, del Grupo Rastar, en el Real Club Deportivo Espanyol o Jiang Lizhang, de la compañía Desports, en el Granada Club de Fútbol.

‘’Me parece bien que inviertan desde fuera, el equipo suba y haya ilusión en la gente’’, señala Rubén Yelo, joven del municipio murciano de Blanca que presenció in situ el partido, al igual que Rafa Ruipérez, a favor de la entrada de dinero de ‘’cualquiera que pueda y sepa hacerlo, sea o no extranjero’’.

La Segunda División B aspira con estos movimientos a normalizar las inversiones extranjeras en una competición marcada por las dificultades económicas, para una mayor difusión que beneficie a clubes y seguidores. El fútbol de Jumilla y Lorca, pionero.

Sergio Perea Martínez

Graduado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.

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