Asia se perfila como el epicentro global de salidas a bolsa en 2025 (y II)

Madrid. El hecho de que haya empresas chinas que elijan cotizar en Hong Kong en vez de en el Nasdaq o en la bolsa neoyorquina implica menos ingresos para los bancos de inversión de Wall Street, en un contexto en el que la legislación estadounidense y las presiones políticas sobre ciertas firmas del gigante asiático siguen introduciendo incertidumbre sobre la continuidad de la cotización en Estados Unidos. Si esta tendencia se intensifica, un cambio en el centro de gravedad de donde cotizan las empresas puede modificar la composición de índices y la dirección de los flujos de liquidez global, que podrían enfocarse más hacia Asia.
En esta línea, Bloomberg señaló recientemente que Nueva York se ha vuelto menos atractiva para los inversores internacionales debido a las fricciones geopolíticas, un giro que les ha llevado a adoptar una postura más positiva con China. Según indicó esta agencia, los bancos de inversión estadounidenses Goldman Sachs y Morgan Stanley están enfrascados en una dura batalla por el primer puesto en la clasificación de colocaciones de acciones en Hong Kong, lo que refleja la magnitud del negocio que está haciendo cada banco al ayudar a las empresas a recaudar fondos en esta burbujeante plaza financiera.
En un reciente informe, Deloitte atestiguó la «entrada sustancial y continua de capital extranjero en Hong Kong, lo que impulsa el volumen de negociación de acciones y las valoraciones». Y añadió que «junto con las políticas que fomentan que las principales empresas del continente coticen en Hong Kong y que agilizan el proceso de solicitud para las empresas que cotizan en acciones A, esto ha provocado que las salidas a bolsa de gran tamaño y megaempresas vuelvan a concentrarse en el mercado de Hong Kong».
Además, ahora que la Reserva Federal estadounidense ha entrado en un ciclo de bajadas de tipos de interés, Deloitte cree que habrá más capital extranjero que busque oportunidades de inversión con alto potencial de crecimiento en Asia, especialmente en los mercados de China continental y Hong Kong. «Esto proporcionará abundante financiación de mercado, apoyo de liquidez y un entorno de valoración más favorable para varias salidas a bolsa de gran tamaño que se espera se estrenen en Hong Kong en el cuarto trimestre de este año», agregó.
Entre las operaciones más rutilantes que se han producido recientemente destaca la de la salida a bolsa en Hong Kong de la compañía minera Zijin Gold International, que captó 3.200 millones de dólares en su estreno bursátil del pasado 30 de septiembre -se retrasó un día por la llegada del tifón Ragasa a China-. Sus acciones se dispararon hasta un 66 %, reflejo de la fuerte demanda, un entusiasmo que se produce en un momento en el que el precio del oro ha alcanzado máximos históricos. Se trata de una de las salidas a bolsa más grandes producidas en Hong Kong este año.
India también tendrá una importancia capital para que Asia consolide la excelente trayectoria de la primera mitad de 2025. El país, cuya economía apunta a un crecimiento del 6,5 % en este ejercicio, va camino de un año récord en salidas a bolsa después de haber mantenido una gran actividad en los seis primeros meses del año, en los que la National Stock Exchange (NSE) recaudó 6.700 millones de dólares, frente a los 5.400 millones del mismo periodo de 2024.
JPMorgan pronostica que las salidas a bolsa en India este año superen los máximos alcanzados en 2024, con varias emisiones valoradas en miles de millones de dólares programadas para los próximos meses. Las empresas indias recaudaron 20.500 millones de dólares a través de 91 ofertas públicas a lo largo del pasado año, lo que convirtió al país en el segundo mayor mercado de salidas a bolsa del mundo en términos de fondos captados, solo por detrás de Estados Unidos.
«Esperamos que los últimos cuatro meses del año sean muy activos” en este mercado, declaró Kevin Foley, director global de mercados de capital de JPMorgan, en una entrevista con Reuters. «La cartera para el resto del año es muy sólida, con varias ofertas públicas de más de 1.000 millones de dólares en preparación y un total estimado de entre 7.000 y 10.000 millones de dólares en emisiones antes de que termine el año», añadió.
Hay dos grandes operaciones que están generando especial expectación en India: por un lado, la salida a bolsa de la firma de servicios financieros Tata Capital, una transacción que podría estar valorada en 2.000 millones de dólares y que sería la mayor del país después de la de Hyundai Motor India en octubre de 2024, y, por otro, la del gigante de la electrónica LG Electronics India.
El atractivo indio se apoya en varios factores como las rebajas de los tipos de interés por parte del Banco de la Reserva de India, la robusta demanda interna de acciones, impulsada por la entrada masiva de inversores minoristas y fondos domésticos, con más de 42.000 millones de dólares canalizados en lo que va de 2025, según cálculos de Goldman Sachs, y las rebajas fiscales, que han liberado recursos para la inversión bursátil.
Es cierto que no hay nada que no sostenga el papel, a pesar de que las potencias mundiales se obstinan por poner en jaque el equilibrio económico y militar mundial. Pero, si bien los riesgos persisten, la región asiática parte con una ventaja: una base de inversores domésticos amplia, reformas para impulsar el mercado y una lista numerosa de operaciones en el horno. Con un entorno que favorece la captación de capital y un flujo constante de empresas dispuestas a aprovecharlo, la región -gracias a Hong Kong e India, epicentros de la actividad global de salidas a bolsa en estos momentos- está mejor posicionada que nunca para liderar el panorama bursátil mundial en los próximos años.