Japón expande al mundo el coleccionismo de zapatillas
Madrid. Hemos oído hablar de todo tipo de coleccionismo desde hace mucho tiempo como un pasatiempo, aunque cada época ha tenido sus modas, desde sellos, monedas o figuras. Pero en los últimos años el mercado de zapatillas deportivas está ganando su lugar en las casas de los amantes de este calzado. Cajas y cajas de zapatos, de ediciones exclusivas sobre todo, se amontonan cada vez más en los hogares.
En lugares como Japón ha surgido un mercado paralelo para cubrir la demanda de los compradores, que contratan a personas para que esperen la cola. Es la otra cara detrás de este coleccionismo: las largas colas en las tiendas, desde días antes del lanzamiento, que ofrecen una edición especial de las ansiadas zapatillas.
Una tienda de Harajuku, un barrio de Tokio, incluso tiene que pedir el documento de identidad y un código de vestimenta (que consiste en llevar unas determinadas zapatillas) a sus clientes ya que solían pagar a gente sin hogar o a estudiantes para hacer cola por ellos.
Las tiendas ya no usan el tradicional sistema de “el primero que llega se lo lleva”, algunas tienen un sistema de lotería para la venta de productos limitados. Todas estas medidas han hecho que las colas que se formaban de 3.000 a 4.000 personas de redujeran a unas 1.200 personas esperando en fila.
Otro mercado que ha surgido, como ocurre en la mayoría de productos de coleccionismo, es la reventa de zapatillas. Personas que compran los productos limitados y los venden a precios más altos de los que se pagan en la compra directa.
Hay personas que han pagado miles de dólares en el mercado de reventa por hacerse con estos productos difíciles de encontrar. Incluso hay noticias de personas que han sido atracadas por las nombradas zapatillas.
A su vez ha surgido el mercado de las falsificaciones, cada vez más sofisticado. Han surgido empresas como Fake Busters que se encarga de ofrecer servicios de autentificación de las zapatillas para asegurar a la gente que compra en la reventa.
Esta empresa fue fundada en abril de 2019 en Japón y desde entonces ha tenido más de 40.000 pedidos. Sus servicios de verificación de autenticidad cuestan desde 550 a 2.000 yenes dependiendo de si el experto ve el calzado en persona o sólo a través de una fotografía.
Se deduce que este mercado alternativo de compra y venta de zapatillas es una gran fuente de dinero para los jóvenes. De hecho, el reciente sitio web XXBlue para la compra de zapatillas online lanzado el pasado septiembre ha declarado que el 87% de los miembros registrados está entre los 18 y 27 años.
Sin embargo, el entusiasmo por las zapatillas no es algo reciente en Japón. Este tipo de zapatillas empezaron a hacerse populares a principio de los noventa gracias al jugador de baloncesto Michael Jordan, aunque el verdadero auge fue tras el lanzamiento de las Nike Air Max 95.
Atmos se hizo con el primer puesto en tiendas de zapatillas cuando abrió en Harajuku en el año 2000 y ahora tiene cerca de 30 sucursales por Japón, así como otra tienda en Nueva York, dos en Corea del Sur, dos en Tailandia y una en Indonesia.
De esta manera se estima que alrededor la mitad de los clientes de algunas de las tiendas de Tokio especializadas en zapatillas sean del extranjero, atraídos por la reputación de la ciudad, conocida como la meca de las zapatillas.
Este primer boom que estaba reducido a un pequeño grupo de coleccionistas en los noventa, ahora se ha hecho tendencia por todas partes y forma parte del mundo de la moda. Cada vez hay más colaboraciones entre las principales marcas del mercado como Dior y Jordan o Adidas y Prada. La cultura de las zapatillas se ha ido estableciendo cada vez más.
Gracias a la llegada de las compras online la búsqueda de los modelos limitados de zapatillas se ha hecho más sencilla y accesible. Antes estos clientes tenían que establecer relaciones con los dependientes de las tiendas para enterarse de las fechas de lanzamiento o incluso que les guardaran algún par si no podían ir lo suficientemente temprano.
Pero ahora es más común que la gente que trabaja en esas tiendas esté cambiando constantemente y sea más difícil establecer relaciones de ese tipo. Además ahora también se publican las fechas por internet y todo el mundo tiene acceso a esta información.
Aunque últimamente también hay tiendas en Tokio que están fomentando la compra presencial motivando a los clientes con puzles o juegos que realizar allí con la oportunidad de acceder a la compra de algún producto exclusivo como premio.
Esta tendencia ha provocado un cambio en la manera de comprar zapatillas. Ya no se pregunta tanto sobre el color de un modelo o aspectos del calzado, sino que los clientes se interesan más en si es una edición limitada o poco común.
De hecho, esta moda por coleccionar zapatillas también ha sido vista en los famosos. Muchos cantantes de K-Pop han subido a sus cuentas de Instagram sus colecciones de zapatillas o sus nuevas adquisiciones de ediciones limitadas.
No hay solo una marca de preferencia, sino que las grandes marcas de zapatillas deportivas compiten con cada modelo que sacan. Las que más fama han conseguido en Corea del Sur son Off-White, Nike y su gama Air Jordan, así como las Adidas Yeezy Boost en particular.
A su vez, las tiendas que ofrecen las ediciones limitadas atraen la atención de los clientes, como el caso de la venta exclusiva de la edición de las Krush Bis de la marca Ash o la colección exclusiva de Boss x Meissen en los centros comerciales.
Esto provocó que en enero de 2019 se reuniera una multitud de gente a las puertas del Lotte Department Store en el centro de Seúl donde se vendían las Off-White x Nike Chuck Taylor 70s. Las zapatillas se agotaron a las tres horas de la apertura.
Por otra parte, este fenómeno no sólo se ha restringido a Asia, sino que algunos modelos que antes se lanzaban solo allí ahora también se pueden conseguir desde Europa, y han tenido su éxito gracias al auge del gusto por lo asiático cada vez más creciente estos días.
Un ejemplo de este fenómeno fue cuando el artista surcoreano G-Dragon sacó una colección única de zapatillas de su propia marca de ropa PEACEMINUSONE en colaboración con Nike, siendo registrado el modelo como “Air Force 1 Para-Noise”.
Aunque el lanzamiento global fue el 23 de noviembre, hubo una edición exclusiva en color rojo que se vendería en Corea del Sur a partir del día 7 del mismo mes y que provocó el colapso y caída de la página web de su venta dada la alta demanda.
En el resto de países donde se vendió esta edición limitada, que contaba con sólo 10.000 pares manufacturados para su venta global, ocurrió algo similar días más tarde, incluido en España, donde también se agotó al poco de su lanzamiento.
Hay que destacar el éxito de G-Dragon, que ha sido el primer artista surcoreano en firmar un contrato de promociones con una compañía de china desde la prohibición impuesta desde Pekín sobre el hallyu o la cultura pop surcoreana desde el 2016.